Otro tiempo siempre fue mejor

Echo de menos cuando hacíamos el amor, el roce, el cariño, todo lo que a nosotros nos rodeaba. Echo de menos compartir contigo días alegres, más días alegres que tristes son los que ahora recuerdo que tuve contigo. Echo de menos el hablarte cada noche, ser tu amiga, ser tu amante, ser tu princesa.. 

Suma y Sigue

Fueron cuatro los segundos que pasaron hasta que pude encontrarte entre los rostros congelados. Y pasó una eternidad al mirarte y contemplar en tus ojos reflejada mi mirada, y hoy bendigo las razones casuales por las que decidiste elegir mi banco para esperar, para encontrar. Fue tu roce, fue tu aroma, despertando mis hormonas lo que me obligó a cerrar la mente y respirar, y controlar la activación. Y mi razón, se convirtió, en buscarte entre las calles, en los parques, tiendas, bares, en sonrisas y destellos de cristal, quien siguió la consiguió, que esta historia comenzó a brillar. Y un buen día te atreviste a confesarme que tenías tanto miedo a que yo supiera de tu realidad y no comprendes, que no es tu signo positivo el que invierte en conflictivo las cosas del querer, que eres tu quien me revuelves, que eres tu quien me enamora, tu quien me convierte en la mejor persona y si tengo que gritarte lo que siento, te digo que te quiero, con tu suerte, con tu mierda, con pasado, con presente, con o sin enfermedad, y tu no ves que quiero seguir comiéndote a besos.. 

A un lado

Dentro de este ruidoso jaleo mejor quedarse a un lado, no participar, no opinar.. El mal rollo está en el aire, lo siento y no me gusta. Ya creo que esto no se trata de criticar a todo el mundo, sino que es ya algo personal. Estos días he vuelto a mis años de gloria, años en los que la mayor importancia estaba en el número de personas que te rodean (sean o no falsos contigo) te quieran más o menos, algo o nada. Atrás han quedado esos pensamientos negativos sobre todos y en cualquier momento. No se si es una ventaja o un inconveniente, pero últimamente no me entero de muchas cosas y, definitivamente, me parece una ventaja esta situación pues así no tengo capacidad ni derecho a juzgar. Mi burbujita, mi adorada burbujita feliz!! la cual quiero seguir manteniendo a mi alrededor..

Mi YO interior

A veces se lee en libros que una persona hace una determinada cosa y, sin embargo, quiere hacer otra. Un personaje que quiere decir a la cara algo y su YO interior le advierte que mejor se calle la boca. Esto también se ve en algunas películas cuando aparecen sobre el hombro del protagonista dos diminutos muñecos, el bien y el mal, uno que le dice que no se meta en líos y otro que solo le aconseja cosas dañinas. 

Pero.. ¿nosotros también tenemos ese YO interior? ¿O es un personaje creado en libros y películas? A veces pienso que sí, que todos esos impulsos ya sean para bien o para mal, están provocados por ese subconsciente que nos incita a realizarlo y no a guardarlo dentro de nosotros. Al igual que en otras ocasiones nos guardamos palabras, gestos o acciones que pensamos que no harán bien o mal alguno.